el acrecentamiento sorprendente de nuestros medios, la flexibilidad, la informaciòn, la cantidad y la precision que estos alcanzan, las ideas y las costumbres que introducen, nos aseguran que en el futuro la aglomeracion nos hundira en un mar de conceptos inentendibles y tan basicos como la mecanizacion; no se habla solo de mecanizacion cuando hablamos del ser expulsado por las maquinas, sino que tambien de un ser expulsado por el otro ser, esta interpretacion se basa en el hecho de que en un futuro y se puede ver incluso ahora que el contacto entre seres reales se esta casi que suprimiendo y se esta suplantando por un objeto que no cabe la menor duda, es inteligente, pero no sensible, no real en nuestro contacto necesario social y con el individuo. Pero hay que tener en cuenta que esto no se puede suprimir de un momento a otro, pues es necesario señalar o enfatizar que este avance, este acrecentamiento, en los metodos de educacion en este caso y el alienamiento cultural deriva de muchisimo trabajo, procesos y ademas tiempo; ni la materia, ni el espacio, ni el tiempo son como lo han sido siempre, evoluciona, se deteriora y no es estatico, todo va de la mano con el tiempo y este va corriendo, así mismo que va deteriorando, lo mismo pasa con el proceso cultural.

Pasar en como se desenvolverá el escenario futuro dentro de unos años, mirándolo desde la perspectiva del niño actual, implica en primer lugar tener la suficiente humildad para reconocer los errores cometidos en la actualidad, pero a la vez, tener la necesaria valentía para corregirlos en el menor plazo posible, y es cierto, se contempla el derecho del niño a ser educado; sin embargo no siempre esta educación termina siendo de calidad ¨ por decirlo así ¨ para quien la recibe. Estamos vivenciando una actualidad en donde ya casi que el docente va ser suprimido por el ¨ avance cultural-tecnológico ¨ no nos queda sino imaginarnos el futuro muy próximo por cierto, por ello considero que la educación la actual por supuesto deberá estar marcada por una cultura de la excelencia, en donde no solo importa cuantos sabes, sino como utilizas ese saber para el bien común social, y es ahí donde se propone al docente como un ser mas desinteresado en cuestiones de servicios propios y mas interesado en el bien común social, haciéndose notar y buscando las formas necesarias para no llegar a perderse ese contacto del ser real, humano, a no dejar que se suprima esa necesidad básica de interacción real.

****mayra alejandra polania martos...***